El
AMOR es un sentimiento profundo y complejo. Como adult@s podemos entender
fácilmente que el amor no es un sentimiento único, sino que más bien profundo y
que hay distintas formas de amar. Existen AMORes.
Sin
embargo, en l@s niñ@s el concepto de amor se encuentra en construcción,
más aún en la edad preescolar. Al principio, para ell@s amar es simplemente
otra forma de querer... pero posiblemente van a poder discernir entre distintas
formas de querer/amar en torno a la edad previa a ser púberes.
Esto
hace que l@s pequeñ@s difícilmente puedan comprender la diferencia entre el
amor que siente cada uno de los integrantes de una pareja hacia el otro, y el
amor que pueden tener para sus hijos e hijas. Hay veces que esto lleva a que
l@s niñ@s piensen que en el futuro van a casarse con su padre o madre, y/o
también que sientan celos del amor y afecto que su padre y madre tienen el uno
por el otro o por su pareja actual.
Es
saludable que expliquemos que los sentimientos no son correspondientes, para
que de a poco se comprenda la intención y los sentimientos propios de cada
vínculo afectivo. El sentimiento de pertenencia a una familia es imprescindible
en el desarrollo, pero igual de importante es aprender que cada uno cumple un
rol único que aporta a la definición del grupo.
Un consejo personal es establecer distintas rutinas que diferencien los vínculos. Por ejemplo los besos en la boca se reservan para los miembros de la pareja, mientras que los besos en las mejillas se comparten con todos los miembros de la familia.
Un consejo personal es establecer distintas rutinas que diferencien los vínculos. Por ejemplo los besos en la boca se reservan para los miembros de la pareja, mientras que los besos en las mejillas se comparten con todos los miembros de la familia.
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